- Monreal Ávila, queriendo congraciarse con “el gran elector” para ser tomado en serio como corcholata, llegó al extremo de amenazar con el Juicio de Procedencia a los ministros
Carlos Romo Medina
SU PASO POR varios partidos exhiben su radiografía política. Es -como muchos políticos- oportunista, corrupto, zalamero, mentiroso, pero, sobre todo: es un superviviente. Su límite es el cielo, hasta que lo tiran de las alturas. Juega y engaña con la retórica. Manosea discrecionalmente los recursos a su alcance. Predice un futuro halagüeño, pero a la hora de la realidad se topa con su funeral político.
ES RICARDO MONREAL ÁVILA, quien presume respetar la ley porque ostenta un doctorado en Derecho, sin embargo, a la hora de la hora, se desvanece en medio de sus aspiraciones -ciertamente legítimas- por alcanzar la candidatura a la Presidencia de la República cuando se convence que está más lejos de ella de lo que la Tierra está de la constelación de Andrómeda.
SU NACIMIENTO POLÍTICO en el PRI en el año de 1975, en que comenzó su carrera política, lo llevó a ocupar varios cargos. En 1985 fue regidor del municipio de Fresnillo, de donde es originario. Tres años después, de 1988 a 1991, fue electo como Diputado Federal para ocupar un escaño en la LIV legislatura por el Distrito 2 de Zacatecas. De 1991 a 1997 fue senador de la República Fue coordinador nacional de la Defensa Jurídica del Voto en la Secretaría de elecciones de la dirigencia nacional; presidió el Comité Directivo Estatal de Zacatecas y, posteriormente, fue secretario de Acción Política de la Confederación Nacional Campesina. En este periodo de militancia participó en el Congreso de la Unión y llegó al puesto de senador de 1991 a1997.
AL ABANDONAR LAS filas del PRI en 1997, se convirtió en el candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD) al gobierno de Zacatecas, en donde pactó con Cuauhtémoc Cárdenas -entonces líder moral del PRD- y con el dirigente nacional “formal” Andrés Manuel López Obrador, el compromiso para apoyar a Amalia García Medina para que fuera su sucesora, porque en ese entonces -se mencionó- “le tocaba” esa candidatura a la vieja militante de la izquierda.
MONREAL ÁVILA narra así ese hecho: “En 1997 volví a ser electo por el Distrito 1 de Zacatecas, y un año después, en 1998, solicité licencia durante mi tercer periodo como legislador después de ser invitado por Andrés Manuel López Obrador a contender por la gubernatura de mi estado natal; tenía treinta y siete años”.
DE 2006 A 2012 fue senador por el partido denominado simplemente Convergencia y que en 2011 cambiara a Movimiento Ciudadano. Ya en 2015, con Morena formalizado como partido ocupó la jefatura delegacional de Cuauhtémoc en la capital del país hasta 2018, cuando fue nombrado candidato al Senado y posteriormente nombrado coordinador de la bancada guinda.
ENTRE 2012 y 2015 fue diputado federal nuevamente, pero esta vez por el Partido Convergencia (hoy Movimiento Ciudadano), y es precisamente en ese 2015 cuando “brinca” para ser fundador de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
CON ESE VAIVÉN de veleta política, Monreal hizo química con López Obrador -otro oportunista- que hasta le sirvió como “coordinador en la campaña presidencial de 2012. Ante las derrotas del tabasqueño, Monreal escribió: “En esa ocasión, la correlación de fuerzas que por tantos años habían protegido a las instituciones antidemocráticas impidió nuevamente que el deseo popular de hacer valer la democracia para cambiar la realidad se concretara en las urnas. El cerco informativo y un caudal de recursos económicos adquiridos y erogados de manera ilegal fueron una barrera que ni las incipientes redes sociales nos permitieron derribar”.
PASÓ EL TIEMPO y en 2018 López y comparsas accedieron al poder. Fue entonces que la lucha por la democracia que habían sostenido de manera aguerrida cesó, y para 2023 dieron un vuelco de 180 grados y ahora son capaces de denostar, insultar y descalificar a otro Poder que conforma la República: La Suprema Corte de Justicia de la Nación.
TODO ELLO MOTIVADO por una simple razón: los 9 ministros que les enmendaron la plana por su inconstitucional primera parte del renombrado Plan “B” en el que los integrantes de los otros dos poderes, el Ejecutivo, pero en espacial el Legislativo, incumplieron y violentaron los procedimientos legislativos. No hubo necesidad de que los ministros ahondaran en el contenido de dichas legislaciones, porque de origen se votó sin cuidar las normas mínimas que rigen la vida legal que rige actualmente en el país. Es una gran mentira afirmar que los ministros pretendan legislar.
ELLO BASTÓ para que Monreal Ávila, queriendo congraciarse con “el gran elector” para ser tomado en serio como corcholata, llegó al extremo de amenazar con el Juicio de Procedencia o desafuero a dichos ministros. Todo ese dechado de virtudes de respeto a la legalidad que presumió Monreal las echó por el caño, aunque luego reculó y negó haber intentado hacerlo.
DEL OTRO MEZQUINO, un presidente agobiado por sus propias mentiras, incapacidad y enredos para gobernar, lo ubicaron en su exacta dimensión: descalificar, agredir, denostar, insultar, pero nunca gobernar y aportar argumentos razonables que busquen la defensa de sus violentas acciones autoritarias, antidemocráticas y por demás perversas, plagadas de mentiras, distorsiones de la verdad y manipulación de los más pobres, de los ignorantes a quienes afirma defender.
LO QUE PRETENDIÓ ser el cambio “verdadero” o la “cuarta transformación” de México, ha quedado reducido a una infame entelequia y a un discurso hipócrita, falso, que por desgracia está destruyendo al país y sus instituciones democráticas que apenas comenzaban a despuntar. La imberbe democracia mexicana está a punto de ser derribada a base de mentiras, hipocresía y mezquindad de quienes siendo corruptos lo niegan cínicamente. “¿Y?”
En sus propias palabras
Dedicar la vida a los asuntos públicos ha sido para mí un verdadero privilegio, pues a lo largo de mis más de cuarenta años de carrera he comprobado que, al margen de las definiciones técnicas, la política es un potente vehículo para combatir la desigualdad, las injusticias, la corrupción, la impunidad y la pobreza. Ricardo Monreal Ávila, coordinador de Morena en el Senado.
La frase del día
Tiene la ciencia sus hipócritas, no menos que la virtud, y no menos es engañado el vulgo por aquéllos que por éstos. Son muchos los indoctos que pasan plaza de sabios. Benito Jerónimo Feijoó (1676-1764). Filósofo y escritor español.
El Bisturí. El ajuste de cuentas entre los sucesos y las declaraciones
El electorado mexicano no es esa masa manipulable con las mentiras, el odio y la división. El “plan c” de llamar al voto masivo en favor de los depredadores guindas, fracasará en las urnas. La ciudadanía se sabe ofendida, humillada pero poderosa para impedir que un puñado de sátrapas desvergonzados destrocen el futuro de sus hijos y nietos.
Colofón
De lo perdido, lo que aparezca. Es clara la postura de Monris. Está en su ADN priista.
